Todos observamos que en la mayoría de libros hay una hoja completamente en blanco, algo en lo que no reparamos habitualmente y que se da por hecho. Pero realmente, ¿para qué sirven las hojas en blanco en los libros?
Estas hojas son llamadas páginas de cortesía y forman parte de una tradición de las editoriales e imprentas que todavía hoy se conserva.
La hoja en blanco es para el lector la hoja de las dedicatorias, de las frases a nuestros seres queridos, y contiene las historias paralelas a nuestros libros. Hacen que nuestro ejemplar sea único.
Imaginemos cuánto valdría un libro en cuya hoja de cortesía hubiera un dibujo dedicado de Van Gogh.
Además, también tiene mucha utilidad para las bibliotecas; sobre todo para saber la fecha de devolución, cuándo fue la última vez que fue prestado, así como para conocer el cuño de la biblioteca a la que pertenece, etc. Sólo con ésto podríamos justificar ya su existencia.
La página de cortesía da a un libro un carácter romántico; es como si ella te dijese:” Prepárate. Estás a punto de entrar en un universo paralelo. Disfrútalo”. Te da aire y te incita a la lectura.
Pero también hay una razón práctica para las hojas de cortesía, ya que tradicionalmente los libros de calidad se imprimen en offset, pues el resultado es mejor. Técnicamente, la impresión en offset se realiza en pliegos que nos obligan a utilizar un número de páginas que sean múltiplos de ocho o de cuatro. Los pliegos son láminas de papeles donde se imprimen ocho páginas juntas en cada cara; que luego se pliegan para la encuadernación. Por eso, estas páginas en blanco quedan libres, en ocasiones, como algo inevitable y por simple cuestión matemática.
Y aunque la impresión digital no tiene ese procedimiento y el numero de páginas es exacto, podría eliminarse para usar menos papel y abaratar (aunque ridículamente) los costes, se sigue manteniendo esta tradición por el valor simbólico que tiene para el lector. Tanto es así, que hace unos años surgió un movimiento llamado “The this page intentionally left blank” para que se conservara la página de cortesías en los libros y para incluso ponerlas también en las webs y así no perdieran su punto romántico y de llegada.
Como ves, los libros tienen mochos entresijos y curiosidades; y en Estugraf impresores te los queremos contar todos.