Los libros de verano nos inspiran a playa, sol, papel mojado al cogerlo con nuestras manos recién mojadas. Y es que la lectura de verano tiene un aura especial. Pero como surgió toda esta cultura de los libros del verano donde internet se llena de artículos como “Lecturas de playa» o «Listas de lectura de verano
¿Pero realmente hay libros para el verano? ¿De dónde surgió esta idea de que hay libros perfectos para esta estación?
Aunque la mayoría de escritores no les gusta demasiado que etiqueten sus libros bajo esta categoría, la verdad es que en el S.XIX fue toda una revolución dentro del mundo editorial.
Ya que se descubrió un concepto de novelas fáciles de publicar, en las que el nivel de exigencia era mucho menor y les permitía una nueva temporada de ventas. Todo esto surgió con la instalación en Estados Unidos e Inglaterra de las vacaciones laborales, cosa que no existía previamente y que fue legitimándose como tiempo para el descanso y para no hacer nada. Y es aquí donde nacen los libros de verano.
Como afirma la prestigiosa revista The New Yorker se considera a los libros de verano fueron los primeros en entender su naturaleza y fueron expresamente escritos con esa finalidad. Estos libros se escribían a propósito. Eran cortos y de fácil lectura y con tapa blanda parta llevarlo cómodamente.
Con el tiempo, la industria se dio cuenta de que la llegada del verano se había convertido en otro de los grandes momentos de venta del año.
Han pasado más de 100 años desde que aparecieron los libros del verano ¿Creéis que tienen el mismo concepto?
Los libros de verano nos inspiran a playa, sol, papel mojado al cogerlo con nuestras manos recién mojadas. Y es que la lectura de verano tiene un aura especial. Pero como surgió toda esta cultura de los libros del verano donde internet se llena de artículos como “Lecturas de playa» o «Listas de lectura de verano
¿Pero realmente hay libros para el verano? ¿De dónde surgió esta idea de que hay libros perfectos para esta estación?
Aunque la mayoría de escritores no les gusta demasiado que etiqueten sus libros bajo esta categoría, la verdad es que en el S.XIX fue toda una revolución dentro del mundo editorial.
Ya que se descubrió un concepto de novelas fáciles de publicar, en las que el nivel de exigencia era mucho menor y les permitía una nueva temporada de ventas. Todo esto surgió con la instalación en Estados Unidos e Inglaterra de las vacaciones laborales, cosa que no existía previamente y que fue legitimándose como tiempo para el descanso y para no hacer nada. Y es aquí donde nacen los libros de verano.
Como afirma la prestigiosa revista The New Yorker se considera a los libros de verano fueron los primeros en entender su naturaleza y fueron expresamente escritos con esa finalidad. Estos libros se escribían a propósito. Eran cortos y de fácil lectura y con tapa blanda parta llevarlo cómodamente.
Con el tiempo, la industria se dio cuenta de que la llegada del verano se había convertido en otro de los grandes momentos de venta del año.
Han pasado más de 100 años desde que aparecieron los libros del verano ¿Creéis que tienen el mismo concepto?
